martes, 10 de diciembre de 2013

Volver al mismo lugar. Es una revelación frente a  la hoja. En medio de esta soledad, estoy acompañado. Todo es por algo. Tengo miedo, es verdad. Ser un cobarde y aceptarlo, es el primer paso hacia la destrucción de ese miedo. Descubro que otra vez me vuelvo a equivocar y es bueno saber que se recibe el castigo! Tumbero de un amor, que lindo es cumplir la condena! Tantos amores en el camino… Hay algo certero y caótico. Y no quiero adornarte con palabritas  colores. No quiero empaparme de nuevo bajo una tormenta centroamericana y mendigar de rodillas un techo. Quiero bañarte con meteoros y esconderme en el paraguas de la vía láctea. Quiero acecharte como en la piel de un leopardo y darte caza como un creso enloquecido en un carro de fuego y bronce. Quiero esculpir la mueca cínica de la complicidad en tu vientre, quiero  acostarme en las cáscaras de nueces del tiempo y desafiar a tus costados. Desarmar ésta tormenta sobre el techo de mi cuarto y pintar las paredes con tus talones. Me queda un round y voy a golpearme con fuerza contra tus ojos, voy a perder el título por decisión unánime. Voy a dejar las condecoraciones en mi otro campera y mandarte las heridas de guerra en un maletín negro. Nada que hacer sino hay poder, delirio; No querer nada es poder.  De ti ya no quiero nada, tan solo el poder. Ya explota desde abajo, este amor bajo el cemento. Tengo aquí mi propio infierno, y no te preocupes, yo atravieso todos los semáforos en rojo. Ya dormiste en mi corazón; ahora te doy la bienvenida a mi cabeza.
Voy a dejar de buscar
donde
nada hay
y sereno
entre éste caos
me voy
a
encontrar.

martes, 6 de agosto de 2013

Libertad: Uso y abuso

La condición necesaria es estirar el espíritu. Bucear en los océanos de la incertidumbre tras la proclama febril que se agita desde los huesos: la sincronía con el tiempo sideral y cósmico, la desmantelación total y expresa de la conducta represiva, de los atavíos que demoran la corriente transgresora, lúdica e introspectiva que necesitan los corazones, libres.
La bandera enarbolada por los voraces glotones de la burocratización del alma debe ser terminantemente aletargada por la inspiración del humano libre: es nuestro pan y derecho, nuestro menester, nuestra responsabilidad y riesgo.
La libertad supone el riesgo como chispa, la entrega total como hoguera, como consuelo ardiente a la zozobra de las concesiones represivas que la cultura de acumulación se adjudica como fuerza y motor hacia la deshumanización, hacia el mercantilismo de nuestras capacidades y relaciones.
Es la libertad el consuelo infinito de quienes la buscan, el destino fatal y último de quienes la proclaman.

martes, 25 de junio de 2013

Submarinos y viajes
letras
para levar
las anclas
despego
y
la tristeza
que es sal
tambalea 
conmigo 

ya no hay papel
no hay angustias
para exprimir
nadie atrás
de la pantalla
nunca
nadie atrás
de la pantalla
ya no hay estufas
ni colchones ni piojos
ni direcciónes
y todo lo que se quema
a la deriva
soy yo

domingo, 28 de abril de 2013


Aventurarse en la noche. La caravana ha marcado el paso.  El listo espera, observa, ve el camino y camina. Todas son asociaciones. Mingus suena. Se asocian en mi mente bailarines, músicos, elefantes, coronas con plumas de quetzales. Piezas teatrales. Hay una representación de una pelea  de boxeo llevada a cabo por dos eunucos. Pienso en el boxeo , en el arte del boxeador, en las figuras cuadriláteras, en la sagrada disciplina y autocultivo del púgil. Una mente sobre el ring que ahora brilla. La música es enloquecedora. ¡Qué viva toda idea viva!
Cuando todas las cabezas están en las almohadas y yo estoy despierto y en algún lado está Mingus seguramente habrá boxeo, porque si está Mingus habrá baile y noche y misterio, balcones llenos de plantas mirando a las estúpidas luces de los edificios, Al brillo artificial de la ciudad. Habrá delirio y contemplación  y ahí la mente se vuelve única e universal.  La noche en la ciudad, es la ciudad. Buenos Aires es la noche.

miércoles, 20 de febrero de 2013



POEMA POR UN NUEVO CIELO PARA SURCAR
Hoy es el día
Me afirmo
Y aunque no siento
Piso alguno
Todo es algodones
Y primaveras, primaveras…
Los anhelos no
Dan tregua y
El espacio está
Vacio
Como una jarra
No hay flores
Igual me rio
Me regocijo
En el desconcierto
Y concreto 
Lo que me queda
Hoy canto
Porque un amor
Se me ahoga en
La garganta
Y la distancia
Quema kilómetro a kilómetro
Me detengo y oigo los
Pasos
Y me alejo
Vacilante
El humo sobre
El sonido de la
Porcelana fría
De la jungla
A un cuarto
De la carretera, nada
Fue ayer digo
Y se fue con
Frazadas, maletas, poemas
El amor empañado
El color inusual
El criminal sabor
De dos labios
El chirrido desgastado
Del cielo azul
Al final
Clavos clavos clavos
Eres un poema
Que no escribiré
Por no querer saber
El final
No te aflijas
Hoy nos creemos
Lo que hacemos
Y con eso
Simplemente está
bien

viernes, 15 de febrero de 2013


A la vagancia

Ah! Querida compañera!
Tanto tiempo y 
aún sin relojes
el viento sopla y 
la arena está volando
Eres cariñosa
no me dejas 
ni en los momentos de inspiración
Dejas las ideas dispersas 
en el universo
disueltas en la inmadurez 
de mi ego
durante su exposición más 
ignota y exuberante
¡Incrédula!
Todo perdura
en los anales de imaginación
Perpetuándose 
ante el mar
todo está 
haciéndose
Tú vienes a 
acompañarme
con tus cautelosa
aseveraciones
Hasta que te disfrazas 
de miedo
y vienes a conquistar
mis dudas
¡Vete!
24 años y no te has dignado a irte!
Frente a la hoja
me asalta tu encanto de
animal sereno
 y  finalmente me digno
a plasmar 
esta canción 
¡ Y es para tí!
¡Gracias!
Compañera inseparable
por caminos y senderos
al calor del fuego
Dicen que un poeta
necesita ocio... pero
¿Cuánto necesito de las cosas?
Tú eres perozosa
ni te molestas
en preguntártelo
como un camaleón
te conformas con 
lo justo
y lo imparcial
es lo mismo 
esto y
aquello
carece de valor
sin creer
sin actuar
sin servir
Eres sabia
y engañosa
Voy a coquetear
lejos de nuestro abrazo
de intimidad
voy a bailar
el vals de pañuelo negro
que desliza
la pereza
bajo los pies
de los hombres
voy 
ayer serviste
hoy 
subo y 
agradezco
con la sonrisa gutural
de la energía
bajo y cuando sea
yaceré
de nuevo contigo
Hasta entonces



jueves, 17 de enero de 2013


Las imágenes son demasiado parecidas. Pero creo comprender: por momentos me siento el mismo guacho de entonces, sin nada, vacio. Hay una verdad: soy yo; soy un guacho. Pero no afirmaría nada respecto a ningún vacio.
Es un momento de templanza, de fundición, de sangrado y de festejo, el momento correcto de hincar el diente en el banquete. Llenarse la panza, saciar los dientes y los retorcijones del estómago.
Es el momento correcto de bailar desnudo con la muerte y proclamar por el voto universal a la totalidad, al desapego de todas las sensaciones; un voto por la eternidad y la salud, la locura y la vida desbordante.
El mismo guacho, pero ahora relacionado a la idea suprema de querer vivir, aceptar el dolor tan profundamente como sea posible, para volver a emergir de las costras del dolor como he visto a el Orinoco emerger pronto desde las orrillas pantanosas.
Hoy, sé que doleré, porque cada día nazco, y comprendo que el sol sufre al parir a sus hijos cada día, cobijarlos bajo su lumbre, darles calor. Sin pretender, espero a quemarme.
Ya no soy yo el que escribe. He perdido mi identidad y ahora vago por la inmensidad de la hoja, galopando el blanco, intentando llenar el vacio con las letras. Es imposible: NUNCA HABRA PALABRAS SUFICIENTES PARA PODER ABARCAR EL SILENCIO